- Mantequilla (1 taza y media)
- Azúcar glass (1 taza)
- Harina (3 tazas)
Lo primero que hice fue derretir la mantequilla en el microondas con la función de descongelar. También podéis dejar la mantequilla fuera de la nevera unas horas. Con este calor con dejarlas unos minutos será más que suficiente ;)
Mezclamos en un bol la mantequilla con el azúcar hasta que estén bien integrados y a continuación vamos añadiendo la harina poco a poco mezclando bien con varillas para que no queden grumos.
Lo importante es que la masa no quede muy líquida. No es como las "cookies" que se expanden en el horno. Estas galletas mantendrán su forma. Lo único que harán será crecer un poco y "hojaldrarse". Por eso, podéis meterlas ya con la forma o hacer una plancha de un centímetro de grosor aproximadamente y cortarla después.
Los puntitos, que me parecieron muy típicos de estas galletas y alguna función tendrán, los hice al sacarlas del horno, con ayuda de un tenedor.
El horno lo pondremos a 160ºC y hornearemos las galletas hasta que estén doradas, de veinte a veinticinco minutos aproximadamente. Aunque si es la primera vez, es mejor estar pendientes porque, como digo siempre, cada horno es un mundo.
Quizás sea una receta más apropiada para meses fríos. Pero ¿a quién le amarga un dulce?
¡Que las disfrutéis!
¡Besos! :)
probaré esta tarde la receta =)
ResponderEliminarMuy buena pinta me la apunto
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ResponderEliminarBuenas buenas,todavia no las he hecho y ya estoy salivando
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